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nescafé frequently asked questions

Preguntas frecuentes

Respuestas a las preguntas que más recibimos en el mundo de NESCAFÉ®.

Listado de Preguntas frecuentes

Los granos de café se descubrieron en Etiopía, donde se siguen cultivando hoy en día. Cuenta la leyenda que un pastor de cabras llamado Kaldi se dio cuenta de que sus cabras se volvían mucho más activas y no querían dormir por la noche después de comer las bayas de cierto arbusto. Ese fue el comienzo de la larga historia del café, cuyo primer uso como bebida se registró en el siglo XV en Yemen. Desde entonces, el café se ha extendido a otras regiones del mundo, y los granos de café NESCAFÉ® proceden de África, Sudamérica y Asia.

Hay 4 tipos de granos de café: arábica, robusta, excelsa y libérica. Los cuatro tienen perfiles de sabor radicalmente diferentes. NESCAFÉ® utiliza una cuidadosa mezcla de dos tipos de granos: arábica, que da un café más suave y dulce, y robusta, que da un café intenso y audaz, con mayor contenido de cafeína.

Un grano de café es la semilla del cafeto. Es la parte que se tuesta, se infusiona y se muele para elaborar los gránulos de café que utilizas cada día. A menudo llamada también cereza, es la pepita dentro del fruto rojo o morado del cafeto.

NESCAFÉ® mezcla cuidadosamente los granos de robusta y arábica para crear nuestros exclusivos gránulos de café soluble. Los granos de arábica que utilizamos se cultivan en América Latina y África Oriental. Los granos de robusta (así como su pariente cercano, el conillón) que usamos requieren diferentes condiciones de crecimiento y se cultivan en el sudeste asiático y África Occidental. El conillón crece específicamente en Brasil.

El café liofilizado se elabora infusionando los granos de café molidos en agua y luego se evapora la mayor cantidad de agua posible para dejar un extracto de café que posteriormente se congela y se rompe en gránulos de café soluble.
Fabricar gránulos de café a partir de granos de café es un proceso largo que se divide en cuatro partes principales: recolección de los granos, secado, tostado y molido.
Los gránulos de café soluble NESCAFÉ® están hechos de café 100 % puro. Lo único que se añade a lo largo del proceso es agua, que se elimina en su mayor parte hacia el final del proceso.
Recomendamos 1 cucharadita (3 gramos) de café soluble NESCAFÉ®, pero es posible que lo prefieras con otro nivel de intensidad. ¡Experimenta y encuentra tu sabor perfecto!
Puedes añadirle tu edulcorante favorito, ya sea azúcar o un jarabe aromatizado. La leche también ayudará a reducir la intensidad y la audacia del café. Se trata de encontrar tu gusto personal, así que no te cortes y experimenta con lo que te gusta para encontrar tu sabor.
Hacer que tu NESCAFÉ® favorito sea deliciosamente más cremoso y suave es tan sencillo como añadir leche, crema o leche en polvo. Un pequeño cambio da para mucho, así que prueba las tres opciones para encontrar tu combinación perfecta.
¡Eso mismo! La única diferencia es que el café helado se hace directamente con agua fría, en lugar de hervirla primero. Aunque los ingredientes son los mismos que los de un café normal (granos de café y agua), puedes añadirle cubitos de hielo, leche fría o nata montada para darle tu estilo personal. No es lo mismo que preparar una taza de NESCAFÉ® caliente y dejarla enfriar: se trata de conseguir una refrescante bebida con tu NESCAFÉ® favorito.
Hay muchas maneras de hacer espuma para el café, sea helado o caliente. Usa una varilla, una batidora eléctrica, una cafetera de émbolo o una espumadora para conseguir una leche espumosa y aterciopelada. Nota: La leche de origen animal consigue más espuma que las alternativas vegetales.
El café es una bebida versátil que combina bien con muchos sabores distintos. Un buen lugar para empezar sería con sabores de avellana, chocolate o caramelo.
Con NESCAFÉ® es bastante sencillo. Solo tienes que hervir agua, añadir 2 cucharaditas de café granulado, remover y disfrutar. También puedes explorar cualquiera de nuestras sencillas recetas con tu mezcla NESCAFÉ® favorita. Pruébalo y verás.
Tienes muchas recetas de café para probar. Hemos reunido algunas de nuestras favoritas, como un Latte de caramelo e incluso un Café de almendras tostadas: pruébalas todas y descubre cuál es tu favorita.
Todo dependerá de tus gustos. Si te gusta el café más dulce, ponle un poco de azúcar o jarabe saborizado. Puedes añadirle leche o una alternativa vegetal como la leche de avena para suavizar ligeramente los sabores más intensos. Experimenta con tus sabores favoritos y descubre qué te gusta más.
La base del café que prepara cualquier barista es un chupito de espresso hecho con granos enteros molidos. Para un americano, simplemente añaden agua caliente a ese chupito de espresso. Con NESCAFÉ® puedes hacer de barista en casa porque hemos hecho el trabajo difícil por ti.
Hay más de 30 combinaciones de tipos de café en el mundo, desde el cappuccino hasta el café con leche. A partir de ahí, hay miles de recetas únicas para hacer tuyos estos tipos de café, y se inventan nuevas recetas continuamente. Pruébalos todos y descubre cuál es tu favorito.
El tipo de café más fuerte es el espresso recién hecho. Constituye la base de la mayoría de las bebidas de café, y es fácil de degustar con leche añadida, pero también puedes tomarlo solo si te gustan los sabores fuertes, atrevidos e intensos del café.
Por regla general, el café menos intenso es el latte. Elaborado con café espresso recién hecho, su sabor es menos intenso por el volumen de leche que se le añade, lo que le confiere un sabor más dulce y meloso.
Un café latte tiene la mayor proporción de leche en relación con el café: 1/3 de espresso y los 2/3 restantes de leche. Le sigue de cerca el cappuccino, que contiene partes iguales de espresso, leche vaporizada y espuma de leche (en una proporción de 1:1:1)
El cappuccino, el café con leche y el espresso son probablemente los tipos más populares o, al menos, los más conocidos. Pero hay mucha más variedad por descubrir y disfrutar. El café con leche se inspira en el latte, pero se hace con café de filtro, mientras que el lungo es parecido al espresso, pero contiene mayor volumen.