Reducción de las emisiones de carbono

Se requieren más que unas cuantas personas para ayudar a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero de NESCAFÉ®. En NESCAFÉ® tenemos un equipo de analistas dedicados que estudian el impacto ambiental y crearon un plan para ayudar a reducirlo. Al analizar nuestra huella de carbono, NESCAFÉ® considera todo: el transporte, la fabricación, el empaquetado, el envío e incluso lo que ocurre después del consumo. Hemos creado programas para reducir nuestro impacto en cada paso y hemos ayudado a que participen las personas que beben NESCAFÉ® en todas partes del mundo. Desde 2010 ya hemos reducido un 46% nuestras emisiones de gases de efecto invernadero en nuestras fábricas de productos solubles globalmente. En NESCAFÉ® creemos que juntos podemos hacer más para reducir el impacto ambiental.

Un suelo y unos bosques sanos son uno de los medios más eficaces para reducir el carbono en la atmósfera terrestre. Para hacer frente a la extensa cadena de suministro de NESCAFÉ®, que incluye miles de explotaciones agrícolas y redes de transporte, nuestro objetivo es salvaguardar tanto el suelo como los bosques para conseguir un cambio sostenible a largo plazo.

Un buen suelo no sólo produce un buen café, sino que captura carbono, reduce la erosión y requiere menos fertilizantes sintéticos. Dado que una gran parte de las emisiones de gases de efecto invernadero en las explotaciones agrícolas procede de los fertilizantes, NESCAFÉ® está ayudando a optimizar el uso de fertilizantes impartiendo formación a los agricultores. Desde Vietnam hasta México, pasando por Brasil e Indonesia, los programas de campo de NESCAFÉ® han ayudado a mejorar los métodos de cultivo, lo que ha dado lugar a que las explotaciones agrícolas utilicen las combinaciones óptimas de fertilizantes sintéticos y orgánicos, y reduzcan el uso de productos agroquímicos. En pocas palabras, un suelo sano ayuda a cultivar un café más sostenible.

Estos programas también nos permiten identificar retos que necesitan intervenciones más específicas. Por ejemplo, hemos identificado puntos conflictivos en materia de derechos laborales, como México, y estamos trabajando para mejorar nuestra capacidad de supervisar y detectar posibles violaciones. Esto nos permite tomar medidas correctivas específicas para apoyar las mejoras como condición necesaria para continuar las relaciones comerciales con esas explotaciones.