Batir la mantequilla, 1 taza de azúcar y el café en un tazón grande. Batir los huevos, el vino y el anís en un tazón mediano. Agregar a la mezcla de mantequilla y combinar bien.

Cernir la harina, polvo de hornear y sal; agregar a la mezcla anterior. Amasar bien con las manos hasta que la masa pueda formar una bola firme. Si la masa está muy seca agrega más vino una cucharada a la vez. Si está muy pegajosa agrega más harina una cucharada a la vez. Divide la masa en tres discos grandes y envuélvelos en plástico. Refrigerar durante la noche.

Precalienta el horno a 350° F. Forrar bandejas para hornear con papel para hornear (parchment paper).

Mezcla la ½ taza de azúcar restante con la canela en un plato poco profundo.

Estira la masa de 1 de los discos sobre una superficie bien enharinada con un rodillo enharinado hasta que tenga 1/4 de pulgada de espesor. Usa 1 disco a la vez, dejando los otros discos en la refrigeradora hasta que estés listo para usarlos.

Cortar en círculos, estrellas y varias formas usando moldes de cortar galletas. Volver a estirar la masa restante y repetir los pasos anteriores. Meter un lado de cada galleta en la mezcla de azúcar y canela y colocar en la bandeja preparada con el lado de azúcar hacia arriba.

Hornear durante 15 a 17 minutos. Sacar del horno e inmediatamente meter las galletas en la mezcla de azúcar y canela nuevamente. Enfriar completamente sobre una rejilla. Repetir con los discos de masa restantes.